A 80 años de la proclamación de la República, nos acordamos de Maria Moliner
Hoy se cumplen exactamente 80 años de la proclamación de la II República Española.
En un día como hoy, hemos querido acordarnos de una mujer cuya labor en pro de la cultura, y más en concreto de la organización y extensión de las bibliotecas públicas, fue importantísima en aquella época, y aún al día de hoy.
Como frutos de esa labor nos dejó varias obras, entre las que podemos destacar: Bibliotecas rurales y redes de bibliotecas en España (1935) y el librito Instrucciones para el servicio de pequeñas bibliotecas (1937).
Y no podemos dejar de mencionar también su participación en las Misiones Pedagógicas de la República.
Para recordar su figura, enlazamos a un texto de Luisa Orera Orera publicado en el Boletíb de la Asociación de Bibliotecarios de Andalucía de hace algunos años. Su título: María Moliner. Sus aportaciones a la política bibliotecaria de la Segunda República
Por otra parte, aprovechamos la ocasión para comunicar que en su memoria se ha renombrado como Sala María Moliner la que hasta ahora era conocida como Sala de Usos Múltiples de la planta alta de la Biblioteca Central.
Igualmente, la hasta ahora denominada Sala de Grupos de la planta baja de la Biblioteca Central pasa a tomar el nombre de Sala Francisco Arévalo, el que fuera periodista y poeta cordobés y trabajador durante varios años de la Biblioteca Municipal de Córdoba.
abril 19th, 2011 a las 12:17
Además de su faceta política y social en una época en la que el analfabetismo era una constante en la España rural de su momento, María Moliner dejó para la posteridad una obra cumbre como es el “Diccionario ideológico de la lengua española”, trabajo que refleja su gran vocación y capacidad como lingüísta, una obra de referencia básica en cualquier biblioteca y, que aconsejo, tambien, poseer también en cualquier casa, pues debe ser consultada en cualquier momento en que se tenga dudas de un vocablo.
Enhorabuena por el nombre elegido para una sala de la biblioteca
abril 19th, 2011 a las 21:28
Sería tambien interesante recuperar una personalidad cordobesa en la biblioteca pública de Córdoba: nos referimos a Manuel Ocaña Jiménez, que de familia muy humilde, con esfuerzo propio de un apasinado autodidacta, se convirtió en un arabista de prestigo. De esta manera, se puede dar a la comunidad una pauta o modelo: el saber sólo necesita dos cosas:constancia e ilusión.
ver: http://wikanda.cordobapedia.es/wiki/Manuel_Oca%C3%B1a_Jim%C3%A9nez
dialnet.unirioja.es/servlet/fichero_articulo?codigo=1270505
cvc.cervantes.es/actcult/mezquita…/fuentes.htm –
http://www.artencordoba.com/…/Mezquita-Catedral-Cordoba-historiografia.html